Lunes, 30 de mayo de 2011
Enviado por Dios
Léase Lucas 7.1-10
Si se aman los unos a los otros, todo el mundo se dará cuenta de que son discípulos míos.
-Juan 13.35 (VPEE)
SOY pastor. Envío a diario un correo electrónico a los miembros de mi congregación, citando un pasaje de la Escritura y comentando sobre lo que puedo ver en él. Uno de los que recibe este mensaje, al igual que el centurión en nuestra lectura, es un soldado. Va a ser enviado a Afghanistán. Al meditar en lo que él está haciendo puedo entender mejor al centurión.
El centurión sabía que los judíos no podían entrar a la casa de un gentil, así que fue amable con Jesús al decir: «Señor, no te molestes, porque yo no merezco que entres en mi casa; por eso, ni siquiera me atreví a ir en persona a buscarte. Solamente da la orden, para que sane mi criado».
Veo a mi amigo soldado, a su esposa e hijas cada miércoles en la noche en la iglesia. Ayer me dijo cuanto aprecia los correos electrónicos con los pasajes bíblicos y dijo: «Mi esposa y las niñas van a necesitar atención adicional en mi ausencia, así que esté pendiente de ellas. ¿Podría hacerlo?». Yo también estoy «bajo la autoridad», la autoridad de Dios, como están todos los creyentes. Es un honor cuidar de los hijos de Dios, y cada uno de nosotros está llamado a hacerlo.
Sr. Dan G. Johnson (Florida, EUA)
Oración:
Oh Dios, ayúdanos a velar por tus hijos. Ayúdanos a luchar por un mundo donde las guerras terminen. Amén.
OREMOS:
PENSAMIENTO PARA EL DÍA
¿Dónde y hacia quien Dios me está enviando hoy?
Por los países afectados por las guerras.
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