Dios hizo todo hermoso en su momento, y puso en la mente humana el sentido del tiempo... - Eclesiastés 3:11 (NVI)
Cierto día cuando charlaba con mi hija mayor (de 12 años), surgió la siguiente interrogante: «Mamá ¿cuándo podré salir sola a pasear con amigas?». Le expliqué que aún no había llegado ese tiempo. Debía, primero, comenzar aprendiendo a viajar sola a distancias cortas (su colegio, por ejemplo) ya que vivíamos en una ciudad que era conocida por la inseguridad. Luego, le indiqué que debía mostrar cierto conocimiento de las calles por las que transitaría. Es decir, debía pasar por un tiempo de aprendizaje, pues como madre conocía los peligros a los que podría exponerse.
Esta situación me recordó al trato que Dios da a nuestras vidas. Transitamos en el mundo con sueños, proyectos y metas por alcanzar, que a veces tardan en concretarse. Pareciera, incluso, que nuestro Padre no quiere darnos ese anhelo más preciado y profundo de nuestro corazón.
Sin embargo, Dios solo está surcando nuestro andar con límites — límites que sirven para cuidarnos hasta que alcancemos la madurez espiritual, límites que nos ayudan a saber valorar los tiempos de espera, durante los cuales crecemos, conocemos más al Creador, vemos su amoroso cuidado y su provisión. Además, límites que al igual que los de un padre o una madre, demuestran cuanto nos ama Dios. Porque aun en la vida cristiana existen tiempos que son los adecuados para cumplir los sueños de Dios para sus hijos.
ORACIÓN DE HOY
Oh Dios, que podamos ser sabios al escuchar tu voz cuando nos guías en nuestro andar diario. Amén.
PENSAMIENTO DEL DÍA
Solo Dios conoce cuales son los tiempos adecuados.
OREMOS
Por los padres de hijos adolescentes
AUTOR
Sra. Blanca Montenegro (Buenos Aires, Argentina)
No hay comentarios:
Publicar un comentario