LECTURA DE HOY
Segunda carta de san Pablo a los Corintios 1:3-11
El Señor está cerca de los quebrantados de corazón, y salva a los de espíritu abatido. - Salmo 34:18 (NVI)
«Tengo malas noticias», dijo el médico. «Tiene cáncer». Quedé en shock y llena de temor. Luego llegaron la pena y las lágrimas. Comenzaron las interminables rondas de exámenes, consultas médicas y tratamientos de quimioterapia. La lucha contra el cáncer ha sido el camino a transitar más difícil de mi vida, pero Dios me toma fuerte de la mano para avanzar juntos, y al caminar voy sintiendo la paz y la sanidad que Dios me da.
Un día, aguardando en la sala de espera abarrotada de un centro médico, tomé un momento para estudiar los rostros de las personas que me rodeaban. Noté miedo, preocupación y desaliento. Sabía cómo se sentían, porque yo también me había sentido así.
Sentí claramente que Dios me llamaba a consolar a estas almas. Me ofrecí como conductora voluntaria en la organización que coordina el transporte gratuito de pacientes de cáncer hasta los centros de tratamiento y consultas médicas. Mientras conduzco a mis nuevos amigos, conversamos sobre los últimos tratamientos, o simplemente sobre el clima o nuestro restaurante favorito. A veces no decimos nada, porque no hay palabras. Lo más importante es que tengo muchas oportunidades de mostrar la compasión de Dios y compartir el mensaje de amor y esperanza de Jesús en maneras que jamás hubiese imaginado.
ORACIÓN DE HOY
Dios de amor, que podamos estar atentos a quienes sufren a nuestro alrededor. Ayúdanos a consolarlos, así como tú nos consuelas. Amén.
PENSAMIENTO DEL DÍA
La compasión de Dios se comunica sin palabras.
OREMOS
por las enfermeras/os de oncología
AUTOR
Sra. Molly Johnson (Carolina del Norte, EE. UU.)
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