Primera carta de san Pablo a los Corintios 10:31-33
Pablo escribió: «Yo, por mi parte, procuro agradar a todos en todo, sin buscar mi propio bien sino el de los demás, para que alcancen la salvación». - 1ª a los Corintios 10:33 (DHH)
Me sentía sola y
fuera de lugar. Estaba segura de haber elegido el lugar equivocado para asistir
al colegio y dediqué horas a intentar convencer a mi mamá de la necesidad de
transferirme a otro colegio o volver a casa por un año. Todos los días oraba
pidiendo una señal que indicase que debía irme.
Sin embargo, decidí
seguir un semestre más y cambié de compañera de cuarto. Durante la primera
semana de clases, ella comenzó a abrir su corazón. Me contó que había estado
teniendo problemas con su fe y que había observado lo fuerte que era mi fe en
Cristo. Ella creía que Dios me había puesto en su vida para que pudiese buscar
su propia relación con Jesucristo.
Cuando oramos, muchas
veces esperamos que Dios nos responda tal como esperamos. En aquel momento
descubrí que mientras oraba pidiendo a Dios un nuevo comienzo y aquello que yo
creía que necesitaba, el Señor estaba haciendo exactamente eso, pero de una
manera diferente a la que yo había imaginado. Había estado tan ocupada buscando
ser feliz dentro de mi propio contexto que había olvidado que la alegría se
halla en Cristo. Como persona cristiana, más allá de donde esté, mi propósito
es llevar a otras personas a Jesús.
PENSAMIENTO
DEL DÍA
Las respuestas de Dios a mis oraciones pueden ser
distintas a lo que espero.
OREMOS
por los nuevos estudiantes universitarios
ORACIÓN DE HOY
Que nuestros corazones estén enfocados
en ti, oh Señor, de modo que todo lo que hagamos sea en tu nombre y para tu
gloria. Amén.
Srta. Savannah Ashley Smith (Carolina del Norte, EE. UU.)
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